Persona Jurídica

lEY DE INSOLVENCIA

La Ley 1116 de 2006 regula la insolvencia empresarial en Colombia, enfocándose en proteger el crédito y mantener la empresa como generadora de empleo. Permite la reorganización para lograr acuerdos de pago con acreedores o la liquidación ordenada si la negociación fracasa.

Beneficios

Suspensión de embargos y remates

Se detienen los procesos judiciales y embargos, dando tiempo para reorganizar las deudas.

Reorganización empresarial

Permite negociar con los acreedores para reestructurar deudas y mantener la operación de la empresa.

Protección del empleo y patrimonio

Preserva la empresa y las fuentes de empleo al evitar la liquidación inmediata.

Liquidación ordenada

Si no se logra la reorganización, permite una liquidación eficiente de los activos.

Paso a paso

Solicitud y Revisión

La empresa presenta la solicitud de insolvencia ante la Superintendencia de Sociedades o el juez competente, demostrando la incapacidad de pago y cumpliendo con los requisitos (mora de más de 90 días con dos o más acreedores).

Negociación y Reorganización

Se suspenden embargos y remates, y comienza la negociación con los acreedores para reestructurar las deudas, con el fin de mantener la operación de la empresa.

 

Liquidación o Cumplimiento

Si el acuerdo de reorganización no es viable o se incumple, se procede con la liquidación ordenada de los activos para pagar a los acreedores.

 

 

Requisitos

Si deseas solicitar nuestros servicios financieros, debes cumplir con ciertos requisitos para aplicar.

Tener deudas con dos o más acreedores, ya sean bancos, cooperativas o individuos.

Debes tener un monto de deudas superior a 30 millones de pesos colombianos.

Para más información o para comenzar, contáctanos por WhatsApp ahora.

PREGUNTAS FRECUENTES

Una persona jurídica es una entidad legal creada por la ley que tiene derechos y obligaciones como una persona natural, pero actúa como una organización independiente. Incluye:

  1. Sociedades Comerciales: Empresas como S.A., S.L., y S.A.S.
  2. Fundaciones y Asociaciones: Organizaciones no lucrativas con fines sociales o educativos.
  3. Cooperativas: Entidades que benefician a sus miembros mediante la cooperación.
  4. Entidades Públicas: Organismos gubernamentales para funciones de interés público.

Pueden celebrar contratos y asumir obligaciones legales sin que sus miembros sean personalmente responsables, salvo excepciones. En insolvencia, pueden enfrentar procesos de reorganización o liquidación.

Una persona natural comerciante es un individuo que realiza actividades comerciales de manera profesional para obtener beneficios. Se distingue por:

  1. Actividades Comerciales: Compra y venta de bienes o servicios con fines lucrativos.
  2. Registro y Obligaciones: Está registrada y debe cumplir con obligaciones legales y fiscales.
  3. Responsabilidad Personal: Responde personalmente por las deudas comerciales con sus bienes personales.
  4. Insolvencia: Puede acceder a procesos de reorganización o liquidación de deudas.

En resumen, es una persona que gestiona un negocio y cumple con las normativas correspondientes.

Una persona natural no comerciante es un individuo que no realiza actividades comerciales regulares ni está registrada como comerciante. Aunque puede tener ingresos, no opera un negocio.

En caso de dificultades financieras, esta persona puede enfrentar procesos de insolvencia distintos a los de un comerciante. La Ley 1564 de 2012, por ejemplo, regula la insolvencia para estas personas, permitiéndoles reorganizar sus deudas o alcanzar acuerdos de pago.

La Ley de Insolvencia puede ofrecer varios beneficios, como la protección contra embargos y acciones legales por parte de los acreedores, la posibilidad de negociar nuevas condiciones de pago, y la oportunidad de reorganizar o liquidar las deudas de manera ordenada. Además, proporciona una segunda oportunidad al deudor para recuperar su estabilidad financiera.

La Ley de Insolvencia es un conjunto de normativas que regulan los procedimientos para manejar la incapacidad de una persona o entidad para cumplir con sus obligaciones financieras. Su objetivo es proporcionar mecanismos para la reorganización o liquidación de deudas, buscando proteger los derechos de los acreedores y ofrecer una segunda oportunidad al deudor.

En general, pueden acogerse a la Ley de Insolvencia tanto personas naturales (comerciantes y no comerciantes) como personas jurídicas (empresas y entidades). La elegibilidad específica puede variar según la legislación aplicable en cada país y el tipo de insolvencia.

La reorganización es un proceso mediante el cual un deudor y sus acreedores negocian y acuerdan un plan para reestructurar las deudas del deudor. El objetivo es permitir que el deudor continúe operando (en el caso de una empresa) o recuperar su estabilidad financiera (en el caso de una persona natural), mientras cumple con nuevas condiciones de pago acordadas.

Después de completar un proceso de insolvencia, algunas deudas pueden ser reestructuradas, renegociadas o incluso eliminadas, dependiendo del acuerdo alcanzado y del tipo de insolvencia. En casos de liquidación, las deudas se saldan en la medida en que los activos disponibles lo permitan, y el saldo restante puede ser eliminado, dependiendo de las disposiciones legales aplicables.